El discurso de Greta Thunberg, los animales libres en los entornos urbanos durante el confinamiento, los cambios para una alimentación responsable que cada vez conquistan más a la sociedad, la agenda 2030 de las Naciones Unidas y la implicación del tejido empresarial no son hechos aislados, marcan una nueva prioridad en el mundo, la de preservar el hogar donde vivimos para las generaciones futuras.
Se habla mucho del cambio de mentalidad de los millenials, y es que en general podría decirse que las generaciones más jóvenes, al menos hoy, se preocupan más por mejorar la sociedad que por generar riqueza. Y además, vivimos en un momento en que los millenials en breve serán los grandes herederos de los baby boomers, sobre todo cuando hablamos del mundo inmobiliario, y la mentalidad de ambas generaciones no tiene nada que ver.
Los datos de energía global son cuanto menos dramáticos cuando analizamos el sector inmobiliario, ya que, según un estudio llevado a cabo Naciones Unidas en 2019, el real estate consume un 40% de la energía global y representa más del 20% de las emisiones internacionales de carbono. Lo que sin duda revela que el parque global inmobiliario es un gran contribuyente al calentamiento global.
En una conferencia realizada hace unos meses, Anthony Slumberg, uno de los principales influencers de proptech a nivel mundial, apuntaba a una frase, Larry Fink, CEO de Blackrock dijo “Climate risk is investment risk”. Cuando es la economía la que se preocupa por un tema ¡atención! Porque ese tema pasa a ser clave, y empiezan a salir soluciones y nuevas oportunidades de negocio.
El mercado inmobiliario cada vez se modula más con las necesidades y los gustos de los clientes, por lo que podemos decir que a día de hoy ya no tenemos elección, serán mejor vistas todas las propuestas que aporten soluciones de valor al mercado pero que además sean beneficiosas para la sociedad y el mundo en el que vivimos.
¿Qué puede hacer el proptech?
- Ser más digitales, evitar transportes y desplazamientos, evitando así contaminación.
- Incentivar los edificios sostenibles e inteligentes que tengan un mejor control sobre su uso.
- Concienciar a la sociedad y a los profesionales sobre los consumos de los bienes inmuebles ayudando así a la reducción a lo largo del tiempo.
- Revisar los materiales y medios utilizados en la construcción y proponer alternativas inteligentes ya que actualmente los materiales utilizados de forma masiva como el cemento, aluminio, PVC y el hormigón tienen un efecto devastador en el medio ambiente.
- Usar el data para ser más eficientes en la construcción y en el uso de los activos.
- Reducir de los residuos ocasionados en construcción, que actualmente representan el 30% de los residuos sólidos totales y el 20% de contaminación de las aguas.
- Incentivar el uso del blockchain para tener más información y trazabilidad de los activos así como de sus usos siendo más eficientes, controlando las emisiones y deshechos.
- Promover una movilidad eficiente en las ciudades.
- Proponer alternativas para aumentar la calidad del aire.
Este es un momento de cambio, un momento de oportunidades, en el que la sociedad está mas sensibilizada, el cuidado del medioambiente en las industrias ya era una tendencia, el Covid-19 la ha acelerado. Se trata de una responsabilidad de todos los players del mercado, en una tarea mucho más grande que todas las que hemos tenido hasta ahora, la responsabilidad de cuidar La Tierra, el lugar donde vivimos.
Sheila Gracia
Directora de Servicios del colectivo API en Cataluña